En opinión de la USTR, el objetivo inicial de Made in China 2025 es garantizar, por diversos medios, que las empresas chinas desarrollen, extraigan o adquieran su propia tecnología, propiedad intelectual y conocimientos técnicos “autóctonos”, así como sus propias marcas. 

Esto impacta a empresas como Qualcomm Incorporated, por ejemplo, quien obtiene una parte importante de sus ingresos de los fabricantes de equipos originales chinos. 

Algunos de los clientes de Qualcomm en China han desarrollado, y otros pueden desarrollar en el futuro, sus propios productos de circuitos integrados y utilizan estos productos de circuitos integrados en sus dispositivos en lugar de los productos de circuitos integrados de Qualcomm, incluso debido a la presión o las políticas del gobierno chino ( cuya campaña Made in China 2025 apunta a una autosuficiencia de semiconductores del 70% para 2025), preocupaciones por la pérdida de acceso a los productos de circuitos integrados de Qualcomm como resultado de acciones o políticas reales, amenazadas o potenciales de los gobiernos de Estados Unidos o China, incluidas las políticas de protección comercial o de seguridad nacional u otras razones.

Opinión de la USTR

Aunque supuestamente solo pretende aumentar la productividad industrial mediante técnicas de fabricación más avanzadas y flexibles, Made in China 2025 es emblemático del enfoque cada vez más sofisticado y evolutivo de China con respecto a la “innovación autóctona”, que se pone de manifiesto en numerosos planes industriales conexos y de apoyo. 

La opiniòn de la USTR es que, en el marco del enfoque perjudicial y anticompetitivo de China respecto a la innovación autóctona, el objetivo común y primordial es sustituir las tecnologías, los productos y los servicios extranjeros por tecnologías, productos y servicios chinos en el mercado chino a través de cualquier medio posible para permitir a las empresas chinas, en primer lugar, dominar el mercado chino y, a continuación, utilizar ese dominio como trampolín para conquistar los mercados internacionales.

Tecnologías

Made in China 2025, que representa los 10 primeros años de una estrategia de 30 años conocida como la Estrategia de una Nación Manufacturera Fuerte, pretende fortalecer las empresas chinas en los 10 sectores estratégicos seleccionados a expensas y en detrimento de las empresas extranjeras y sus tecnologías, productos y servicios mediante un proceso de varias fases a lo largo de 10 años.

El siguiente objetivo de Made in China 2025 es sustituir las tecnologías, productos y servicios extranjeros por tecnologías, productos y servicios nacionales en el mercado chino.