Los gobiernos de los países han tenido tres alternativas para enfrentar los aranceles de Donald Trump, presidente de Estados Unidos.
Trump impuso aranceles “de emergencia” sobre productos de México, China y Canadá, “recíprocos” sobre bienes de decenas de países, bajo la Sección 232 (acero, aluminio, automóviles y autopartes) y bajo la Sección 301 (productos originarios de China).
Alternativas para enfrentar los aranceles
Este jueves, un tribunal federal de apelaciones en Estados Unidos restableció temporalmente los “aranceles recíprocos” y los vinculados a la “emergencia por fentanilo”. La medida suspende una decisión previa mientras se analizan más argumentos legales. Aún no hay un fallo definitivo sobre esta política clave del presidente Trump.
Juan Antonio Dorantes, socio director de la consultora Dorantes Advisors, destacó estas tres alternativas para enfrentar los aranceles:
- Negociar con la administración Trump.
- Recurrir a mecanismos de solución de diferencias de la Organización Mundial de Comercio (OMC) o de los tratados comerciales.
- Impugnar en el poder judicial de Estados Unidos.
El Circuito Federal, con sede en Washington, D.C., tomó una nueva medida en el litigio por aranceles. Solicitó a las empresas que impugnaron las tarifas que presenten sus argumentos por escrito antes del 5 de junio. A su vez, pidió al Departamento de Justicia responder antes del 9 de junio.
“Desde que inició toda esta vorágine de medidas unilaterales de Estados Unidos se contemplaba que una de las posibles variables que habría que tener en consideración eran los propios juicios que internamente se iban a interponer contra todas estas órdenes ejecutivas y circulares”, dijo Dorantes.
Otros juicios
El primer fallo sobre los aranceles de Trump fue emitido por el Tribunal de Comercio Internacional de Estados Unidos, que revisa disputas sobre leyes aduaneras y comerciales.
Este tribunal supervisa casos relacionados con aranceles, importaciones y decisiones de agencias como la Oficina de Aduanas. Opera con jueces especializados y tiene jurisdicción exclusiva sobre ciertos litigios vinculados al comercio internacional y medidas proteccionistas.
“Había mucha expectativa, porque muchos de los jueces de este tribunal internacional de comercio tienden a darle la razón al gobierno en muchas ocasiones”, dijo Dorantes. “Es un tribunal bastante independiente, habrá que ver cómo vienen las demás demandas”.