Exportaciones de fresas frescas desde México caen 4.6% en 2023
Las exportaciones de fresas frescas desde México al mundo cayeron 4.6% de 2022 a 2023, al totalizar 750 millones de dólares, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía.
México tiene una producción de fresas durante todo el año debido al uso de horticultura protegida y a su clima favorable en diferentes regiones.
Después de crecer de 568 millones de dólares en 2019 a 589 millones en 2020, las exportaciones de fresas frescas mexicanas aumentaron también de 735 millones en 2021 a 786 millones en 2022.
Estados Unidos es el principal destino de las exportaciones mexicanas de fresas, con 99.8% de los envíos a ese mercado, dada su proximidad geográfica y la alta demanda del mercado estadounidense.
Las bayas se encuentran entre los cultivos frutales de mayor valor producidos en los Estados Unidos en los últimos años.
Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), en 2020, las fresas representaron más de 2,000 millones de dólares en ventas anuales en la finca y alrededor de 12% del valor total de la producción de frutas, lo que las convierte en la tercera fruta más producida en los Estados Unidos después de las uvas y las manzanas.
La mayor conciencia de los consumidores sobre los beneficios para la salud de las bayas y su disponibilidad durante todo el año aumentaron la demanda interna.
Exportaciones de fresas frescas
La disponibilidad nacional anual per cápita de fresas y arándanos frescos, un indicador del consumo, se disparó entre 2000-2002 y 2018-2020 (89% para las fresas y 574% para los arándanos).
El aumento de la demanda se produjo predominantemente en las bayas frescas, ya que el consumo de bayas congeladas creció menos del 2 por ciento durante este período.
En 2022, las uvas, fresas y manzanas representaron 70% del valor agrícola de frutas no cítricas.
Perspectiva
Durante el período 2022-2033, se espera que la proporción del valor de las explotaciones frutícolas correspondientes a estos principales productos básicos no cítricos aumente ligeramente, mientras que la superficie cultivada de frutas de hueso en algunos estados pasa a otros cultivos.
El USDA espera que el volumen de producción de productos no cítricos se mantenga relativamente estable durante la próxima década, ya que las plantaciones de variedades de mayor rendimiento compensarán una ligera disminución en la superficie cultivada no cítrica.
