Si bien se espera un menor dinamismo del sector externo con respecto a 2023, México se beneficiará de la construcción de plantas manufactureras en Estados Unidos en 2024, proyectó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Según su perspectiva, los sectores económicos de México con mayor integración comercial con Estados Unidos podrían verse beneficiados por el impulso que ha tenido la inversión extranjera y la manufactura, donde se ha visto una mayor construcción de plantas manufactureras dentro y fuera de este país. 

De esta manera, entre 2024 y 2025, las nuevas plantas manufactureras comenzarán a operar a su máxima capacidad, lo cual implica la creación de nuevas cadenas de valor que involucrarán a empresas mexicanas.

Plantas manufactureras

Hacia el cierre de 2024, la SHCP estima que el crecimiento de la actividad económica en México mantenga un buen desempeño, impulsado por el comportamiento del mercado interno, el cual continuará beneficiándose del aumento del empleo y los efectos permanentes del gasto en infraestructura y protección social. 

Hacia 2025, la estimación de crecimiento se mantiene con respecto a lo publicado en los Criterios Generales de Política Económica 2024, en un rango de entre 2.0 y 3.0 por ciento. 

Esta proyección considera un crecimiento sostenido de la demanda interna, donde el empleo y la economía familiar tendrán una contribución importante al crecimiento nacional. 

Además, las nuevas tendencias globales de tecnología e intercambio comercial, aunado a los nuevos encadenamientos productivos generados por la relocalización de empresas, permitirán posicionar a México en la cadena de proveeduría global, beneficiando tanto a sectores tradicionalmente integrados con Estados Unidos, como a nuevos sectores que se desarrollen bajo el nuevo paradigma.

Bienes duraderos

La producción industrial en Estados Unidos registró un crecimiento anual de 0.2% en 2023, luego de haber crecido 3.4% en 2022. 

Este menor dinamismo se explicó por una contracción de 0.6% anual en el sector de manufacturas, que cuenta con una participación del 75.2% en el total. 

Los rubros que más contribuyeron a la caída de las manufacturas estuvieron en el grupo de bienes no duraderos tales como alimentos, bebidas y tabaco, químicos y papel, que registraron caídas anuales de 2.2, 4.5 y 6.6% respectivamente. 

Mientras que la producción de bienes duraderos se desaceleró, sectores importantes como productos de madera, maquinaria y muebles se contrajeron con respecto al año previo.