Varias partes interesadas que participaron en las consultas en México sobre el T-MEC cuestionaron los subsidios agrícolas estadounidenses.
“Probablemente en el caso del campo vas a encontrar la preocupación de que Estados Unidos tiene subsidios muy grandes y el agricultor mexicano está en desventaja”, dijo Marcelo Ebrard, secretario de Economía, como parte de algunos ejemplos que dio sobre los resultados de las consultas.
Subsidios agrícolas estadounidenses
Según estimaciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), las exportaciones agrícolas sostienen más de 1.25 millones de empleos en el país. Además, cerca del 70 % se concentra fuera del campo. Principalmente, en actividades como procesamiento y manufactura agrícola. En 2024, el valor total de estas exportaciones alcanzó 183,700 millones de dólares.
En paralelo, las estimaciones para 2025 indican un alto nivel de apoyo público. La suma de los subsidios federales al sector agrícola podría ubicarse entre 33,000 millones y 35,000 millones de dólares. La cifra incluye pagos directos, seguros, incentivos de conservación y otros esquemas de apoyo.
No obstante, 2024 presentó retos relevantes. Las exportaciones agrícolas enfrentaron los efectos del cambio climático sobre los rendimientos. También, disrupciones en la cadena de suministro derivadas de conflictos regionales. A ello se sumaron diferencias regulatorias entre socios comerciales.
Frente a este escenario, la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) reforzó su coordinación con otras agencias federales. El objetivo fue apoyar a los actores agrícolas en la diversificación de mercados. Asimismo, impulsar el uso de tecnologías agrícolas para mejorar sostenibilidad y productividad. Todo ello, mediante la eliminación de barreras comerciales injustificadas y la ampliación del acceso a los mercados.
Biotecnología
Las Partes del T-MEC celebraron la tercera reunión del Grupo de Trabajo para la Cooperación en Biotecnología Agrícola el 4 de marzo de 2024. Durante el encuentro, Estados Unidos planteó inquietudes. Además, solicitó información sobre las políticas de México en materia de biotecnología agrícola.
En ese marco, las Partes compartieron actualizaciones regulatorias. También analizaron el papel de la biotecnología agrícola frente al cambio climático, la sostenibilidad y la seguridad alimentaria.
El proceso escaló meses antes. El 17 de agosto de 2023, Estados Unidos solicitó la conformación de un panel de solución de controversias bajo el T-MEC. El reclamo se dirigió contra dos medidas incluidas en el decreto presidencial de México del 13 de febrero de 2023. Por un lado, la prohibición del uso de maíz transgénico en tortillas o masa. Por otro, la instrucción de sustituir gradualmente —y, en los hechos, prohibir— el uso de maíz transgénico en productos para consumo humano y alimento animal.
Desde la perspectiva de Estados Unidos, estas medidas eran incompatibles con compromisos asumidos por México en el T-MEC. En específico, con disposiciones de los capítulos de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias y de Acceso al Mercado. El 26 de junio de 2024, Estados Unidos participó en la audiencia ante el panel. Meses después, el 20 de diciembre de 2024, el panel dio a conocer su informe final.
El fallo fue contundente. El panel coincidió con Estados Unidos en las siete reclamaciones legales. Concluyó que las medidas de México carecían de fundamento científico. Además, determinó que socavaban el acceso al mercado que México se comprometió a garantizar en el marco del T-MEC.