México cuenta con una canasta exportadora diversificada, indica un informe de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y de la Corporación Financiera Internacional (CFI).
Entre sus exportaciones están productos tan variados como melones, sombreros, guacamole, autos, estufas, plata, artesanías, tequila y carne de cerdo.
Tan chicos como los peces de ornato y tan grandes como los tractocamiones y las estructuras de aviones. Lo mismo baratos como los cacahuates o caros como las joyas. Típicos como los sombreros de charro y universales como los balones de fútbol.
Canasta exportadora
En 2024, México exportó productos por un valor de 617,000 millones de dólares, un aumento de 4% interanual. Con ello, se ubicó como el décimo exportador mundial. Su participación en las exportaciones mundiales de bienes fue de 2.5%, según datos de la OMC.
México mantiene una canasta comercial amplia y diversificada. Según la OMC y la CFI, actualmente exporta 4,700 productos e importa 4,973, lo que cubre casi la totalidad de los bienes transables a nivel global. Este patrón ha mostrado pocos cambios a lo largo del tiempo.
El sector electrónico mexicano resalta por su variedad y competitividad. La diversidad de productos exportados refleja su fuerte integración en las cadenas globales de valor. Esta conexión se ha profundizado con Estados Unidos y Canadá, especialmente tras la entrada en vigor del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Además, en los últimos 10 años, México ha diversificado moderadamente su portafolio comercial. Sin embargo, donde más se nota el crecimiento es en la expansión de mercados de exportación. Este dinamismo es particularmente visible en los sectores automotriz y de instrumentos de precisión.
Exportaciones de nicho
México ha logrado algo que pocos países consiguen. Exporta más de 100 productos que ni Estados Unidos ni Canadá venden al mundo.
La lista es diversa. Incluye desde mezcal artesanal hasta insecticidas biológicos y componentes eléctricos personalizados.
Este tipo de exportaciones revela un aspecto relevante. México no solo compite dentro del bloque comercial de América del Norte. También ha desarrollado nichos propios que reflejan su capacidad para innovar y adaptarse.
Además, el país aprovecha sus ventajas productivas regionales. En sectores como el agroindustrial o el manufacturero, ha sabido generar microespecialización que lo distingue en los mercados globales.