En los Estados Unidos, los mercados laborales se están recuperando, pero la tasa general de desempleo aún supera la tasa prepandémica.

En un discurso ante The Economic Club of New York el 10 de febrero de 2021, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, indicó que la economía de Estados Unidos estaba “todavía muy lejos de un mercado laboral sólido cuyos beneficios se comparten ampliamente”.

Según un análisis del Congreso estadounidense, durante el período de 49 semanas desde mediados de marzo de 2020 hasta mediados de febrero de 2021, casi 79 millones de estadounidenses (casi la mitad de los 160 millones de trabajadores civiles) habían solicitado el seguro de desempleo.

En base a esto, el número de personas aseguradas desempleadas fue de 4.5 millones a principios de febrero de 2021, por debajo del pico de 25 millones a mediados de mayo.

Los siniestros semanales han caído desde los fuertes incrementos registrados en abril y mayo.

Semana tras semana, los nuevos reclamos totalizaron 861,000 en la semana que finalizó el 13 de febrero de 2021, aumentando en 13,000 desde el total de 848,000 de la semana anterior, cuatro veces más que el número promedio de reclamos semanales de alrededor de 200,000 registrados antes de la pandemia de Covid-19.

En la semana que finalizó el 30 de enero de 2021, 18.3 millones de personas reclamaron beneficios en todos los programas, 1.3 millones menos que el total de la semana anterior.

Desempleo

La ola inicial de infecciones por Covid-19 llevó a una contracción histórica en la actividad económica como resultado de restricciones obligatorias y cambios voluntarios en el comportamiento de los hogares y las empresas.

El nivel del Producto Interno Bruto (PIB) de estados Unidos cayó 10% acumulado durante la primera mitad de 2020 y la tasa de desempleo medida se disparó a un máximo de 14.8% posterior a la Segunda Guerra Mundial en abril.

A medida que posteriormente se relajaron las restricciones obligatorias y los hogares y las empresas se adaptaron a las condiciones de la pandemia, muchos sectores de la economía se recuperaron rápidamente y el desempleo retrocedió.

Sin embargo, de acuerdo con la Fed, el impulso se desaceleró sustancialmente a fines del otoño y principios del invierno, ya que el gasto en muchos servicios se contrajo nuevamente en medio del empeoramiento de la pandemia.

En total, se estima que el PIB ha disminuido 2.5% durante los cuatro trimestres del año pasado y el empleo en nómina en enero estaba casi 10 millones de puestos de trabajo por debajo de los niveles prepandémicos, mientras que la tasa de desempleo se mantuvo elevada en 6.3 por ciento y la tasa de participación en la fuerza laboral estaba muy deprimida.

La pérdida de empleos ha sido más severa y el desempleo sigue siendo particularmente elevado entre los hispanos, afroamericanos y otros grupos minoritarios, así como entre los que tienen trabajos con salarios más bajos.