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Propuestas de Trump para el TLCAN dividen al gobierno de Estados Unidos

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Varias de las propuestas más polémicas presentadas por el gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, para la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no han contado con el consenso del gobierno estadounidense.

De hecho, ésa es la razón por las cuales no se pusieron en la mesa de negociaciones durante la tercera ronda de negociaciones, de acuerdo con fuentes al tanto.

Robert Lighthizer, representante comercial de la Casa Blanca, no puso proponer oficialmente la cláusula sunset, con la cual se tendría que ratificar el TLCAN cada cinco años, ni tampoco las reglas de origen medidas por país y no por región, porque en ambos casos se mantenía un disenso hasta entonces.

Lighthizer recibió respuestas negativas de algunos congresistas de su país sobre estos puntos y no obtuvo el consenso en las agencias de gobierno involucradas.

Tras la conclusión de la tercera ronda de negociaciones, el Representante Comercial dijo que las propuestas que Estados Unidos presentó a México y Canadá tuvieron el consentimiento “al 100%” en la administración del presidente Trump.

Lighthizer no puso en la mesa de negociaciones otras iniciativas anunciadas por Trump y su gabinete, como las reglas de origen en el sector automotriz, la reducción del déficit comercial de su país o la desaparición del Capítulo 19, relacionado con la solución de controversias.

Una vez que se conoció la declaración del funcionario estadounidense sobre el asentimiento al 100%, en el gobierno y los empresarios de México hubo una mayor preocupación porque Estados Unidos hizo oficial, en la tercera ronda, su iniciativa de poner una medida especial para permitir investigaciones para dumping o subsidios prohibidos de manera acotada a temporalidad para frutos y vegetales, que implica periodos más cortos en las indagaciones.

En sus objetivos para la renegociación del TLCAN que presentó a mediados de julio al Congreso estadounidense, Trump no incluyó la cláusula del sunset. En tanto, las empresas armadoras de automóviles de los tres países se han pronunciado por no cambiar las reglas de origen del sector automotriz.

El gobierno de Trump requiere alcanzar una negociación que permita no sólo la aprobación del Congreso de Estados Unidos, sino también el aval de los gobiernos de México y Canadá, y posteriormente del Congreso mexicano y del Parlamento canadiense.

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