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Obsesión de Trump por déficit comercial de EEUU preocupa a la Secretaría de Economía

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La obsesión del presidente estadounidense, Donald Trump, por fijar como objetivo de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) reducir el déficit comercial de Estados Unidos es un factor de preocupación, afirmó Ildefonso Guajardo, secretario de Economía.

“La insistencia reiterada sobre este tema de los déficits comerciales (…) sigue siendo preocupante”, dijo Guajardo a Televisa. “Yo he insistido en que con todo gusto revisamos los balances comerciales mientras enfoquemos en cómo mejorarlos a través de expansión del comercio, no a través de reducción del mismo”.

Trump difundió en la víspera que mantiene el objetivo de reducir el déficit comercial que tiene Estados Unidos en el comercio de bienes con México y Canadá, sin especificar en qué medida y cómo lo lograría.

Esta meta fue fijada en el documento de 17 páginas Resumen de los Objetivos para la Renegociación del TLCAN, presentado por la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR, por su sigla en inglés) al Congreso estadounidense como parte del proceso de actualización de ese acuerdo comercial.

“La América que existió cuando se firmó el TLCAN no es la América que vemos hoy.

Algunos estadounidenses se han beneficiado del nuevo acceso a los mercados proporcionado por el Acuerdo. Contribuyó a la vinculación del continente a través del comercio, mientras que el TLCAN proporcionaba el acceso al mercado muy necesario para los agricultores y rancheros estadounidenses”, dijo la USTR en ese documento.

“Pero el TLCAN también creó nuevos problemas para muchos trabajadores estadounidenses. Desde que el acuerdo entró en vigor en 1994, los déficits comerciales han explotado, miles de fábricas se han cerrado y millones de estadounidenses se han quedado varados, incapaces de utilizar las habilidades para las que habían sido entrenados”, agregó.

En el mismo texto, el gobierno estadounidense establece que buscará hacer más estrictas las reglas de origen del TLCAN, pero no da más detalles sobre ello.

La administración Trump expuso que ha celebrado decenas de reuniones para solicitar asesoramiento e información. Además, la USTR solicitó comentarios públicos y recibió más de 12,000 respuestas. Por último, la USTR celebró tres días de audiencias públicas sobre las negociaciones y escuchó a más de 140 testigos, quienes aportaron testimonios sobre una amplia gama de sectores, entre ellos la agricultura, la manufactura, los servicios y el comercio digital.

“Durante este proceso, la Administración recibió asesoramiento valioso que ha impactado directamente en el desarrollo de los objetivos de negociación”, dijo la USTR.

De conformidad con la Ley Bipartidista sobre Prioridades Comerciales y Rendición de Cuentas del 2015, el gobierno de Trump dijo que los objetivos reflejan la contribución recibida durante el periodo de consulta anterior por parte del Congreso, comités consultivos, otras agencias y miembros del público.

Como parte del proceso, la USTR continuará consultando con el Congreso y las partes interesadas y actualizará estos objetivos a medida que avance su trabajo en las negociaciones.

“El nuevo TLCAN se modernizará para reflejar las normas del siglo XXI y reflejará un acuerdo más justo, abordando los persistentes desequilibrios comerciales en América del Norte. Garantizará que los Estados Unidos obtengan un acceso al mercado más abierto, equitativo, seguro y recíproco y que nuestro acuerdo comercial con nuestros dos principales mercados de exportación se aplique efectivamente”, agregó la USTR.

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