Alberto Fernández gana la Presidencia de Argentina
El candidato Alberto Fernández resultó ganador de las elecciones presidenciales de Argentina, al obtener el 47.8% de los sufragios, con más del 80% de los votos escrutados, informó hoy la Cámara Nacional Electoral (CNE).
De acuerdo con los sondeos electorales más recientes, la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández, de la Coalición Frente de Todos, aventaja a la fórmula del presidente Mauricio Macri-Miguel Ángel Pichetto, de Juntos por el Cambio.
Durante la campaña, Alberto Fernández, quien se desempeñó como jefe de gabinete del presidente Néstor Kirchner, argumentó que Macri ha destruido la economía argentina y no pudo borrar la pobreza y la inflación como prometió.
También Fernández criticó el papel del Fondo Monetario Internacional (FMI) por no aliviar los problemas económicos de Argentina.
Sin embargo, se comprometió a cumplir con las deudas de Argentina y renegociar un acuerdo con el FMI que distribuiría los pagos y relajaría los objetivos fiscales. Además, se comprometió a combatir el hambre y la pobreza y congelar los precios de la electricidad y el gas.
Alberto Fernández y las alianzas
La fórmula Fernández-Fernández unió a la facción izquierdista popular del peronismo, dirigida por Cristina Fernández, y a los peronistas moderados representados por Alberto Fernández. Significativamente, la coalición cuenta con el apoyo de Sergio Massa, un peronista centrista que ocupa el tercer lugar en la carrera presidencial de 2015; se esperaba que se postulara en 2019, pero optó por postularse para el Congreso como parte de la coalición Frente de Todos.
De confirmarse esta tendencia, Fernández será presidente sin necesidad de una segunda vuelta, ya que la ley electoral argentina prevé la victoria en primera vuelta con el 45% de los votos.
La actual crisis económica de Argentina, marcada por la recesión, la alta inflación y el aumento de la pobreza, fue el factor más importante en la contienda presidencial. La elección determinará cómo Argentina responde a su crisis económica y podría tener implicaciones para la política exterior de Argentina, incluido su enfoque hacia Venezuela.
